El enfoque en la industria química en Europa occidental está cada vez más centrado en especializaciones; productos con un mayor valor agregado, pero volúmenes más pequeños. Se espera una flexibilidad cada vez mayor de las instalaciones. Esto incrementa la complejidad, mientras que los requisitos de seguridad aumentan. Conocemos el campo de tensión en el que nuestros clientes deben trabajar y ofrecemos en este contexto nuevas soluciones, tanto para procesos continuos como discontinuos.